Fuente de la lengua: español
Traducciones: alemán

Poema final para una antología

 

 

Frente a mi

hay un libro abierto

una mujer

el eco de una guerra cíclica

una bandera trasplantada

la llamada de la línea del horizonte

un cielo generosamente abierto

un camino al centro del bosque

miles de músicos tocando inagotables

una triunfal sinfonía inmensa

o la íntima música que me levanta cada día

 

Algunas —muy pocas—

certezas para un débil soplo

que generalmente pastan libres

fuera de mi vista

en el inmenso prado de todas las cosas.

Y los poemas como mares

o como granos de arena y pedrería celeste.

 

Frente a mi también hay

el bullicio de los amigos

ciertas tardes llenas de sol

de ciudades

colinas

rostros

la contemplación reflejada en los estanques de la memoria,

 

El caminar de gente que no conozco

algo que se dicen, un gesto que los muestra dignos.

Y no por último,

algunas dudas

perdidas en el fondo de un baúl trajinado.

 

Un mirar de frente a los hombres

y otra certeza —ésta del corazón—

apaciblemente recostada a los pies de mi cama:

El mundo es un sitio para amar.

 

Schlussgedicht für eine Anthologie

 

Vor mir

ein offenes Buch

eine Frau

das Echo eines wiederkehrenden Krieges

eine verpflanzte Fahne

der Ruf der Linie des Horizonts

ein großzügiger, weiter Himmel

ein Weg tief in den Wald hinein

tausende unermüdlich spielende Musiker

eine gigantische Triumphsymphonie

oder die vertraute Musik, die mich jeden Tag neu aufstehen lässt.

 

Einige – wenige –

Gewissheiten für einen Windhauch

die meist frei weiden

außerhalb meines Blickfelds

auf der riesigen Wiese der Dinge.

Und Gedichte wie Meere

oder Sandkörner und himmlische Edelsteine.

 

Vor mir auch

das Getöse der Freunde

an manchen Nachmittagen voller Sonne

Städte

Hügel

Gesichter

Betrachtung gespiegelt in den Gewässern des Gedächtnisses.

 

Der Gang unbekannter Menschen

etwas, das sie sich erzählen, eine Geste, mit der sie sich als würdig erweisen.

Und nicht zuletzt

ein paar verlorene

Zweifel am Grunde einer abgenutzten Truhe.

 

Ein Blick, den Menschen ins Gesicht,

eine weitere Gewissheit – die des Herzens –

lehnt entspannt am Fuß meines Bettes:

Die Welt ist ein liebenswerter Ort.

 

 

traducido por: Odile Kennel
Fuente de la lengua: español
Traducciones: alemán